Brian Cashman ha dicho que él es uno de los que cree en la teoría de construir con un equipo con una sólida línea central, algo que aprendió hace décadas del ya fallecido súperscout de los Yankees, Gene Michael. Conjuntos con sólidos peloteros en la receptoría, el shortstop, la segunda base y el jardín usualmente están bien armados para ser contendores.

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Mientras el gerente general sigue pensando en cómo lucirá el roster de los Yankees para el 2022, Cashman ha visto las señales que revelan debilidades en varias de esas áreas, lo que aumenta las posibilidades de que el equipo trate de solucionar dichos problemas en la agencia libre o el mercado de cambios durante el invierno.

“Vamos a ir con mente abierta sobre todo lo que tiene que ver con el roster, como deberíamos serlo”, dijo Cashman. “Voy a tratar de mejorar al equipo, como siempre hacemos. Ciertamente después de la temporada 2021, hay algunos puntos débiles que han salido a relucir en muchas categorías y que no existían antes de este año”.

Cashman dijo que el presupuesto del equipo para el 2022 no se ha terminado de definir, pero el GG reconoció que el shortstop es un área que deben atacar. Los Yankees abandonaron el experimento con el venezolano Gleyber Torres en septiembre, moviendo a Torres a segunda base, donde el club cree que estará mejor de cara al futuro.

Cashman indicó que le gustaría encontrar una solución para las paradas cortas que esté por encima de las opciones que ya tiene la organización, como el colombiano Gio Urshela y Andrew Velázquez, con Urshela apuntando una vez más a ser el antesalista del club.

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Esta temporada muerte presentará muchas opciones de primer nivel para el shorstop, incluyendo al puertorriqueño Carlos Correa, Marcus Semien, Corey Seager y Trevor Story.

“Nosotros creíamos que teníamos a un buen pelotero en esa posición, Gleyber Torres, para la temporada 2021, pero las cosas no salieron como esperábamos”, siguió Cashman. “Yo diría, dadas las circunstancias, que sin duda alguna necesitamos mejorar defensivamente en esa posición para el 2022”.

Cashman dijo que su meta es tener un equipo con más habilidades atléticas y que haga más contacto del que tuvieron en el 2021. El esperado regreso del jardinero central y bateador ambidextro, Aaron Hicks, podría ayudar a mejorar la defensiva y los problemas de balance en el orden ofensivo.

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Notablemente, Cashman no hizo comentarios cuando le preguntaron si pensaba que el dominicano Gary Sánchez iba a ser el receptor regular en el 2022. Sánchez no comenzó detrás del palto en el Juego del Comodín contra los Medias Rojas, trabajo que recayó en Kyle Higashioka.

“Ya veremos. Yo sé una cosa, Gary ha trabajado muchísimo”, dijo Cashman. “Yo sé que los resultados quizás no han estado allí, pero estoy orgulloso de tener un muchacho con mucho corazón, que se preocupa y se esfuerza mucho”.